martes, 2 de agosto de 2011

La Insinuación


Si no escribiría, mataría.

Puede que sí, puede que no.

La escritura es un medio para liberar tensiones.

Ya lo he dicho. Creo que lo he dicho. Aunque no estoy tan seguro si eso es lo que dije o bien quizás lo insinué.

Es muy distinto insinuar que decir. Hay una diferencia notable. Y capaz que lo cierto es que insinué, no lo dije.

Sólo lo insinué como para que un espíritu inquieto lo perciba. Pero no lo narré con claridad.

Creo que no. Pero no estoy seguro.

Tal vez en determinado pasaje de algún escrito sí.

Lo dije con precisión. Lo mencioné en detalle y propuse cierta claridad.

Pero ahí ya tendría que tener en la mente todo lo escrito. Para poder hablar con propiedad y hacerme cargo de la afirmación. Que evite así la suposición y abra innecesariamente la posibilidad de caer en la pavada.

Esa aseveración enceguecida que carece de fundamento. Se reafirma a rajatabla, aún careciendo de sustento.

Así que más vale quedarme ahí nomás. No hacerme cargo de una afirmación que me excede.

Para qué lo haría. Debería ser tonto para inmiscuirme gratuitamente en una falencia que no me acontece.

Así que no. Me quedo acá. Ni un paso más.

Sólo sugiero que hubo cierta insinuación. Que precisó a la escritura como un medio de fuga. De liberación de la tensión.

Que permite al ser humano acometer justicia y reducir los costos, que lo que implicaría obrar en las circunstancias.

Pero tengamos bien en claro, y esto sí que es importante.

Una cosa es la insinuación.

Otra muy distinta es la manifestación de esa insinuación.

Ahí sí. Eso lo apunto hoy.

Porque es muy cierto.
.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Podés dejar tu comentario como usuario de Blogger, con tu nombre o en forma anónima. Seleccioná abajo.